La constructora SARE es una de las empresas patrocinadoras del grupo ultraderechista Yo Influyo, creado por Fernando Argomedo y Rosa Marta Abascal de Anton.
Cualquier persona puede comprobar lo anterior, abriendo la página de ese grupo (http://www.yoinfluyo.com), donde se listan sus patrocinadores, que son, además de SARE: Telmex, GUTSA, otra empresa constructora que desde hace tiempo apoya a la extrema derecha, Te Laggs, galletas Marian, que hasta difunde en yo influyo un video promocional de sus productos en la mencionada página de Yo Influyo, donde también se incluyen videos de Abascal, Luis Pazos y de la Coparmex. El presencia de SARE en esa página no es nueva. En su trabajo "Las guerras sucias en Internet" (http://www.lacoctelera.com/
Como mencionaba Islas, en ese tiempo Yo Influyo, al igual que otras organizaciones derechistas, había "desplegado una intensa ofensiva multimedia en Internet contra López Obrador, antes durante y después del domingo 2 de julio".
Posteriormente, Yo Influyo se ha sumado a las campañas derechistas contra proyectos como el de la reciente consulta popular sobre la privatización de Pemex, y sistemáticamente apoya a la derecha en el poder, al gobierno fecal, a la vez que se opone al estado laico, a los derechos sexuales, etc.
Es, pues, un espacio de la extrema derecha católica, afín al grupo español Hazte Oír (http://www.hazteoir.org), en la cual de hecho se inspiró Yo Influyo.
Los hechos anteriores son conocidos. Lo extraño es que ahora, pese a que su publicidad sigue apareciendo en la página de Yo Influyo, SARE quiere "deslindarse" totalmente de esa organización, actitud que resulta absurda, ante la evidencia a todos accesible.
El jueves 7 de agosto, en carta publicada en La Jornada, Itzel Meyenberg, identificándose simplemente como "relaciones públicas", afirma : "La desarrolladora SARE niega categóricamente formar parte del grupo Yo Influyo y haberse integrado a una campaña en contra de la consulta ciudadana (del 27 de julio pasado".
Meyenberg (quien en la Web aparece asociada de la empresa Guerra y Castellanos, de "comunicación estratégica": www.gcya.net/itzel.html) y sobre todo SARE, la empresa para quien trabaja, y que sigue patrocinando a Yo Influyo, recurren a una trampa infantil para negar los hechos, al refutar algo distinto de lo que está en cuestión.
Lo que se había afirmado en La Jornada, el pasado 30 de julio, haciendo referencia a declaraciones mías, es que SARE patrocina a Yo influyo, no precisamente que "forme parte" de él.
En suma: a SARE nunca le ha incomodado aparecer oficialmente como patrocinadora de Yo Influyo, a la que de esa manera la otorga su aval desde hace años, lo que no quiere es que el asunto trascienda en los medios impresos.
Son las maniobras tramposas de los empresarios que apoyan a la ultraderecha a la vez que dicen "no tenemos nada que ver con esos grupos".
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