Afamada investigadora denuncia alianza de McCain con terroristas

• El dossier de Posada es manejado "al más alto nivel" en el
Departamento de Justicia, reveló un abogado a Ann Louise Bardach
• Otro le comentó que la investigación de un Gran Jurado en Nueva York se encuentra paralizada para no dañar la campaña republicana

POR JEAN-GUY ALLARD

ANN Louise Bardach, la reportera norteamericana famosa por sus entrevistas con Luis Posada Carriles y sus investigaciones acerca del terrorismo cubanoamericano, expone en un amplio artículo redactado para el sitio web www.slate.com los profundos lazos que vinculan al candidato presidencial republicano John McCain con connotados terroristas de Miami.

Bardach subraya que la campaña de McCain posee "sus propias conexiones cuestionables con terroristas".

"McCain ha asociado su campaña con el Cuban Liberty Council, un grupo anti-Castro intransigente que dictó su política a George W. Bush", escribe la reportera. "Dos de los miembros más preeminentes de esta organización, la personalidad mediática Ninoska Perez-Castellón y su marido, Roberto Martín Perez, han estado entre los más dedicados propagandistas y defensores de McCain en Miami".

Como resultado, la campaña de McCain y sus propios asesores se encuentran aliados con individuos "que cometieron actos que cualquier observador razonable definiría como terrorismo", dice la afamada investigadora.

Bardach recuerda que en su libro Los caminos del guerrero, el terrorista internacional Luis Posada Carriles agradece a dos actuales miembros del Cuban Liberty Council por su ayuda.

Confirma luego cómo "cientos de páginas" de documentos desclasificados del FBI, de la CIA y del Departamento de Estado "no dejan dudas" de que las autoridades norteamericanas concuerdan con los servicios de inteligencia "de Venezuela, Trinidad y Cuba" según los cuales Posada y Bosch planearon la destrucción en vuelo del avión de Cubana, ocurrida en 1976.

"PRUEBAS CONTUNDENTES" DEL ESTADO ENTREGADAS EN 2007

Bardach, a quien la Fiscalía intentó sin éxito constreñir a testificar acerca de Posada ante un Gran Jurado de Nueva York, también revela que un abogado de cómplices del terrorista le dijo que esta investigación se encuentra ahora paralizada para no dañar la campaña republicana.

Estos individuos fueron avisados por el FBI de serían invitados a comparecer en el 2007. "Ahora dice que está convencido de que nada ocurrirá por las elecciones y el daño que pudiera hacerse al 'ticket' de McCain, a los Diaz-Balart y a (Ileana) Ros-Lehtinen".

Según la periodista, Posada había recibido garantías antes de su llegada en territorio norteamericano.

"Partidarios de Posada me han dicho que había sido discretamente asegurado por varios líderes del exilio de Miami de que le sería permitido vivir libre en Estados Unidos como (Orlando) Bosch", escribe Bardach.

"Después del escándalo internacional acerca de su liberación, un Gran Jurado fue convocado en Newark (New Jersey) en enero del 2006 para escuchar pruebas contra Posada y los atentados de La Habana", precisa al contar cómo investigadores del FBI testificaron que Posada había introducido explosivos "en botellas de champú y zapatos" en Cuba.

"Docenas de testigos han testificado ante el Gran Jurado en dos años y medio. El 19 y el 20 de septiembre del 2007, dos testigos constreñidos a entregar evidencias del estado ofrecieron pruebas contundentes que implican a Posada y sus cómplices".

El dossier de Posada es manejado "al más alto nivel" del Departamento de Justicia, le confirmó un defensor del viejo agente de la CIA.

LIEBERMAN SE REUNE CON LA ESPOSA DE AROCENA

Bardach revela cómo, el 20 de julio último, mientras se encontraba apoyando la campaña de McCain en Miami, el senador Joe Lieberman (entonces aspirante a la candidatura de vicepresidente) se reunió con la esposa del terrorista encarcelado Eduardo Arocena, ex jefe de la organización Omega 7, y le aseguró que intentaría conseguir un indulto presidencial a favor de su marido.

Arocena es un capo terrorista que sembró la muerte en territorio norteamericano desde 1975 hasta 1983. Su grupo fue entonces calificado por el propio FBI como la organización terrorista más peligrosa del continente.

La investigadora explica que al escogerse al congresista Lincoln Díaz-Balart de asesor principal para América Latina, confía en un hombre que, junto con su colega Ileana Ros-Lehtinen, ha conseguido la liberación de otros dos terroristas, Jose Dionisio "Charco de Sangre" Suarez Esquivel y Virgilio Paz Romero, ambos condenados por el asesinato en 1976 del ex canciller chileno Orlando Letelier y su colega Ronni Moffitt, ocurrido en Washington.

Bardach revela luego que Valentín Hernández, condenado a cadena perpetua por haber ultimado a Luciano Nieves, un emigrado cubano que favorecía la normalización de las relaciones con Cuba, se encuentra ahora libre en Miami, gracias a presiones ejercidas por Díaz-Balart.

Nieves fue sorprendido por Hernández y un cómplice, el 21 de febrero de 1975, a su salida del hospital pediátrico Variety Children's de Miami donde había ido a visitar su hijo de once años enfermo. Desde su cuarto, el niño oyó los disparos.

El 2 de mayo del 2005, hubo una gala de recolección de fondos a favor de Luis Posada en el Big Five Club. "Lincoln Diaz-Balart y Ros-Lehtinen fueron invitados", escribe la reportera.

Unos meses antes, un Posada "relajado y conversador" asistió a otro evento a favor de un conocido contrarrevolucionario. "A poca distancia de él, en medio de los ping y los cling de las copas, se encontraban los representantes Lincoln Diaz-Balart y Ros-Lehtinen".

Lo más probable es que si el 'ticket' McCain-Palin triunfa en noviembre, los procedimientos contra Posada serán descartados, comenta la experimentada periodista.

Ann Louise Bardach es autora de Cuba Confidential (Vintage). Dirige el Media Project en la Universidad de California en Santa Barbara. Colabora regularmente con conocidas publicaciones norteamericanas.

Realizó para el New York Times esa famosa entrevista con Luis Posada Carriles donde el asesino confiesa el financiamiento de sus actividades por la Fundación Nacional Cubano Americana.

En el 2006, reveló cómo el expediente de Posada, conservado por el FBI de Miami, había sido repentinamente echado al triturador de papeles, "en el 2003".