“Víctimas selectivas”, campesinos, jefes comunitarios, indígenas y sindicalistas, denuncian
Más de 14 mil personas perecieron desde que Álvaro Uribe llegó al poder, afirma líder de juristas
Afp y Dpa
Ginebra, 9 de diciembre. Un grupo de organizaciones no gubernamentales (ONG) advirtió este martes aquí sobre la “gravedad” de la situación de los derechos humanos en Colombia, donde “siete personas han sido asesinadas o desaparecidas al día por la violencia sociopolítica” desde 2002, en vísperas de un debate en el Consejo de Derechos Humanos de la Organización de Naciones Unidas (ONU), del que esperan “medidas” concretas contra el gobierno del presidente Álvaro Uribe.
“Más de 14 mil personas murieron o fueron desaparecidas fuera de combate por razones sociopolíticas” desde mediados de 2002, cuando llegó al poder el presidente Uribe, precisó en un encuentro con la prensa en la sede ginebrina de la ONU Gustavo Gallón, presidente de la Comisión Colombiana de Juristas, quien asistirá al debate en el contexto del Examen Periódico Universal al que será sometida Colombia.
De su lado, Eric Sottas, director de la Organización Mundial contra la Tortura (OMCT), abogó por que el informe que elabore el consejo “ponga el acento en las medidas a adoptar y no sea consensuado” sobre la situación en Colombia donde las ONG denuncian la violencia del Estado, de la guerrilla de izquierda y de los paramilitares de ultraderecha.
Unas mil ONG –entre éstas la OMCT– elevaron un informe a la alta comisionada de la ONU para los Derechos Humanos, la sudafricana Navi Pillay, en el cual afirman que el gobierno colombiano “no ha acatado las recomendaciones emitidas por la Comisión de Derechos Humanos”, que precedió al consejo creado en 2006.
Campesinos, líderes comunitarios, indígenas, sindicalistas, defensores de los derechos humanos “son víctimas selectivas” de violaciones a los derechos humanos: ejecuciones extrajudiciales, desapariciones, torturas, detenciones arbitrarias y desplazamientos forzados, entre otros, recordaron.
“Dos mil setecientos sindicalistas fueron asesinados o desaparecieron en los últimos 22 años”, puntualizó Gallón. “Este año solamente unos 40 han muerto y desde 2002, más de 480”, agregó antes de recordar que existe un acuerdo entre el gobierno de Uribe y la Organización Internacional del Trabajo (OIT) para acelerar las investigaciones.
Pero, “al ritmo que van (...) para investigar los 2 mil 700 casos, se necesitarán 60 años”, lamentó el letrado colombiano. Setenta y cinco defensores de los derechos humanos han muerto o desaparecido desde 2002, recordó.
En Caracas, en tanto, la ex candidata presidencial colombiana Ingrid Betancourt afirmó que nunca desconfió del presidente de Venezuela, Hugo Chávez, ni pensó que que “él tenga relaciones clandestinas o pecaminosas” con las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC).
Al término de su gira por América del Sur, la ex candidata presidencia Ingrid Betancourt regresó desde Colombia hacia Francia acompañada por Wilson Bueno, alias Isaza, el guerrillero que el mes pasado desertó de las filas de las FARC con un secuestrado.
Nótese que en los dos países (México y Colombia) en los que Washington ha apoyado la imposición de un usurpador y que se han convertido en viles criados sometidos al imperio es donde más crímenes se cometen. Y cómo sería de otro modo si su patrón es un genocida.
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