Expropió Venezuela Cemento Andino, de capital colombiano

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Caracas, 10 de agosto. El gobierno de Venezuela decretó el viernes la "adquisición forzosa" de los bienes de la Corporación de Cemento Andino, propiedad de la empresa colombiana Cementos Argos, que será expropiada tras ser declarada de utilidad pública y de interés social.

Cementos Argos está enfrascada en una batalla jurídica en Venezuela desde que en 2006 un juzgado de ejecución ordenó a Cemento Andino la entrega de la fábrica a una persona que dijo estar amparada en una orden judicial.

El presidente de Argos, José Alberto Vélez, dijo que no le sorprendió la expropiación y que esa acción no interrumpirá los planes de internacionalización de la firma.

"Esperamos que se haga justicia", señaló Vélez el viernes en una entrevista durante una asamblea de empresarios.

"Esperamos que antes del 15 de agosto, que son las vacaciones del Tribunal Supremo de Justicia, se produzca un fallo favorable a nosotros y estamos confiados en que se haga justicia", agregó.

Vélez dijo que si el fallo no le es favorable lo apelarán.

La Corporación de Cemento Andino dijo el jueves en un comunicado que fue objeto de un "despojo" en 2006 y que desde entonces "se ha visto afectada por daños y perjuicios por un monto superior a los 50 millones de dólares".

La Gaceta Oficial del viernes dijo que la adquisición forzosa se hace para ejecutar la obra Desarrollo Endógeno Cementero Andino, para continuar produciendo y comercializando cemento.

El boletín agregó que se promoverá el desarrollo de asociaciones cooperativas para que la propiedad de la planta sea colectiva y en ella puedan participar los trabajadores.

La expropiación es la primera que se hace a un empresa de Colombia en Venezuela, después de que el gobierno nacionalizara la mayor firma de telecomunicaciones del país y la principal eléctrica privada, compensando por ello a las estadunidenses Verizon y AES Corp por sus inversiones.

Además, las petroleras estadunidenses Exxon Mobil y ConocoPhillips están negociando con el gobierno por sus activos en la Faja Petrolífera del Orinoco, que fueron estatizados en junio.

Mientras el gobierno de Venezuela le regresa al pueblo lo que es del pueblo, en México le roban al pueblo para darle a las transnacionales y a los ricos enfermos de avaricia.