Ante la serie de explosiones y atentados a Pemex no se sabe qué pensar:
Por una parte, las estrategias de la derecha de provocar "ataques" para llevar a cabo sus planes de privatización y de permitir la ingerencia de los Estados Unidos en nuestro territorio, que son las mismas que históricamente han llevado a cabo en otras latitudes, nos conduce a concluir que son autoatentados del gobierno.
Por otra parte, el estado de descontento en general y las supuestas declaraciones del EPR, grupo guerrillero, de atribuirse la autoría de éstos para demandar la aparición de sus compañeros desaparecidos, nos podría hacer suponer que son atentados auténticos y que el EPR ya está en franca lucha armada contra el gobierno.
¿Son o no auténticos los atentados a Pemex?
Algo que no es congruente con este segundo criterio es que atacando Pemex estarían atacando el patrimonio de los mexicanos y ellos son mexicanos que supuestamente luchan por la justicia social, es decir, se estarían autoatacando y afectando sus propios bienes. ¿Por qué atentar contra Pemex y no contra la Bolsa de Valores, por ejemplo?
Sin embargo, en nuestra desatada fantasía se nos ocurre que pudieran ser las dos cosas. Es en efecto un autoatentado del gobierno que ha sabido infiltrar dentro del EPR alborotadores que animen a los atentados a Pemex para llevar a cabo sus planes, arriba mencionados, y que los miembros del EPR se deciden por efectuarlos como forma de presión para que aparezcan sus compañeros desaparecidos.
Pero volvemos a lo mismo, no se sabe qué pensar, y esto es producto de que acostumbrados a la mentira, es difícil reconocer la verdad.
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