El Justo Reclamo

México, el país más peligroso de AL para la prensa: RSF

de la redacción

México, D.F., 16 de octubre (apro).- México sigue siendo el país más peligroso de América Latina para la prensa, y Cuba está una vez más este año en los últimos lugares de la clasificación sobre respeto de la libertad de expresión en la región, según un reporte publicado hoy en París por la organización Reporteros sin Fronteras (RSF).Según un despacho de AFP, México “continúa siendo el país más peligroso del continente para la prensa, destacando que desde septiembre de 2006 y hasta ahora han sido muertos ocho profesionales de la información”.Destaca que la libertad de la prensa ha sufrido “cierta degradación”en México, donde las amenazas de grupos de narcotraficantes a periodistas han dejado de centrarse en las zonas fronterizas con Estados Unidos para abarcar otras áreas, indicó un portavoz de la organización.Mientras "la justicia (mexicana) no consigue sancionar a todos los responsables, y la impunidad continúa siendo ampliamente la regla", asegura RSF.RSF también denuncia que "en Cuba, año y medio después de la investidura oficial de Raúl Castro a la cabeza del Estado, la anunciada transición no ha cambiado en nada la situación de los derechos humanos en la isla”, donde hay “24 periodistas encarcelados y sometidos a muy severas condiciones de detención”.En el informe se destaca también el caso de Colombia, donde “no han matado a ningún periodista”, lo que según la organización “es toda una noticia”, si bien indica que sigue habiendo muy fuertes presiones de los grupos armados y de los paramilitares.Reporteros sin Fronteras denuncia también casos de violencia contra profesionales de la prensa en Brasil y Argentina, señalando que el récord en la materia lo tiene Perú, donde se ha atacado físicamente a un centenar de periodistas y existe así mismo un número muy elevado de éstos que ha recibido amenazas.En el informe también se hace referencia a Venezuela y a la suspensión por el gobierno de la concesión para emisión por vía herziana del canal RCTV, medio de difusión que se mantiene a través del cable.Algunos países latinoamericanos han mejorado en el respeto de la libertad de la prensa, como Uruguay, Nicaragua y Bolivia. En el caso de este último país, RSF estima que sólo se trató sin embargo de un hecho coyuntural, y este año ha sido cuestionado por serias violaciones.El Salvador también perdió terreno en la clasificación de RSF.Así mismo, RSF y la Sociedad Interamericana de Prensa (SIP) coincidieron en señalar que las detenciones, secuestros y asesinatos contra los periodistas hace de esta profesión una de las más peligrosas. La postura de ambas organizaciones se da en momentos en que la experiodista Carina Cota y su esposo José Enrique Téllez Girón fueron ejecutados en Culiacán, Sinaloa. Mientras tanto, al clausurar su 63 asamblea general en Miami, Florida, la SIP aprobó hoy los informes sobre el estado de la libertad de prensa en el continente, en donde los periodistas se enfrentan todavía a graves obstáculos que les induce a ejercer la “autocensura”. La SIP criticó también que los gobiernos de Argentina, Aruba, Ecuador, Guyana, México, Nicaragua, Uruguay y Venezuela siguen valiéndose de la publicidad oficial como mecanismo de presión hacia los medios de comunicación. En el informe de conclusiones sobre la libertad de prensa se destaca que en el último semestre se ha contabilizado la muerte de nueve periodistas y tres voceadores de diarios, además del secuestro de dos reporteros el pasado mes de mayo sin que todavía hayan sido encontrados. La presión contra los periodistas ha obligado a muchos medios a dejar de cubrir hechos relacionados con bandas criminales, la corrupción gubernamental, e incluso dos periódicos en México se vieron obligados a cerrar por la falta de seguridad para sus empleados. Como dato positivo, la SIP subrayó que en México se ha logrado la despenalización de los delitos de calumnia e injuria, con lo que se convierte en el segundo país que lo hace después de El Salvador. También la SIP alabó la creciente tendencia en la región de promulgar legislaciones en pro del acceso a la información pública.