Denuncian que fomentan la fuga de ganancias
Matilde Pérez U.
La instalación de cafeterías de franquicias extranjeras no ayuda a los productores ni contribuye a elevar el consumo nacional del grano aromático, pero sí fomenta la fuga de ganancias millonarias, pues una sola taza de esa bebida requiere únicamente 7 gramos de grano, dijo Alberto Peniche Echánove, presidente de la Asociación Agrícola de Cafeticultores de Coatepec.
Al dar a conocer la unificación de pequeños productores cafetaleros con la empresa Hablemos de Café, dijo que la aspiración de los campesinos dedicados al cultivo del grano es que se incremente el consumo per cápita anual, que actualmente es de 1.2 kilogramos, cuando con una buena campaña y cultura de consumo podría llegar a los 8 kilogramos.
El cultivo, abundó, es el ingreso principal para 4.5 millones de mexicanos involucrados con la producción y comercialización del café; sin embargo, se ha dejado en el abandono, pues México pasó del cuarto al séptimo lugar como productor mundial y está en el sitio 23 como consumidor, aunque la calidad del café es tan buena como la de Colombia y Brasil.
Descartó que los precios internacionales –que en las semanas recientes se han elevado– ayuden a los productores de café mexicano. “Esa es una situación en la bolsa de granos y que empuja a la venta de grandes cantidades, pero no de mejores calidades”.
Joaquín González Cedeño, representante de la micro empresa Hablemos de Café, comentó que además del acercamiento con los productores, la intención es difundir entre la población los diferentes tipos del grano mexicano, sus mitos y realidades, y ayudar a quienes tienen cafeterías a utilizar sus equipos para preparar la bebida y a los consumidores enseñarles a ser más exigentes.
“La producción y consumo de café es una cuestión de pasión, no sólo de mercado”, abundó Peniche Echánove.
La Unión Nacional de Productores de Café de la Confederación Nacional Campesina indicó que en los pasados siete años la producción del grano ha sufrido una caída de 30 por ciento, debido al atraso en la entrega de los apoyos y a la falta de rentabilidad para el productor, lo que también repercutió, junto con las bajas cotizaciones, en el declive, en 50 por ciento, de los ingresos de divisas por la venta de café, que hasta finales de la década de los 80 ocupó, junto con la actividad turística, los primeros lugares en el ingreso de divisas.
El año pasado, la producción fue de 4.5 millones de sacos de 60 kilogramos de café verde, de los cuales 2.9 millones se exportaron y generaron ingresos por 329.2 millones de dólares.
Suscribirse a:
Comentarios de la entrada (Atom)
No hay comentarios.:
Publicar un comentario