La política entreguista del gobierno agudiza la descomposición social, señala en Guerrero
Insuficiente, aumentar el número de soldados y policías para frenar la delincuencia, sostiene
Ciro Pérez Silva (Enviado)
Andrés Manuel López Obrador, durante la reunión que sostuvo con habitantes del municipio de Huamuxitlán, en el estado de Guerrero. Foto: La Jornada
Xochihuehuetlán, Gro., 6 de agosto. La solución al grave problema de la inseguridad pública no tiene respuesta en el incremento de soldados y policías en las calles o en penas más severas, sino en el cambio mediante una reforma económica que garantice el acceso a la educación, la generación de fuentes de empleo y que reduzca las diferencias entre los mexicanos, aseguró aquí Andrés Manuel López Obrador.
“México atraviesa por una gran crisis de inseguridad, con una marcada descomposición social, que se profundiza con la política económica antipopular y entreguista que el gobierno espurio insiste en imponer en el país”, señaló el tabasqueño al comenzar una nueva gira de trabajo en la zona de La Montaña guerrerense.
“Ahora que se están sucediendo hechos de violencia muy lamentables, cobra más fuerza lo que nosotros hemos venido proponiendo desde el inicio de la campaña presidencial: ‘¡Por el bien de todos, primero los pobres¡’, porque para encauzar esta descomposición social y económica es indispensable combatir la desigualdad y la pobreza”, afirmó.
El ex jefe de Gobierno del Distrito Federal enfatizó que la inseguridad no se va a resolver con más soldados o policías, ni con penas más severas, y llamó a los habitantes de esta región, integrada en forma mayoritaria por indígenas y campesinos, a no esperar que este cambio de política económica se inicie “de arriba para abajo”, sino que deben estar conscientes de que cualquier modificación tendrá como base el movimiento de resistencia civil pacífica.
“Los de arriba son unos insensibles e irresponsables, porque a pesar de que en el pueblo aumentan la frustración, la inseguridad y la violencia, lo que sigue proponiendo el gobierno espurio es mantener la misma política social antipopular y entreguista, como lo evidencia su interés por darle a los extranjeros los beneficios de la explotación petrolera”.
A manera de ejemplo, destacó que en 18 meses del actual régimen, la inseguridad y la violencia en el país se han incrementado, el precio de los productos básicos aumentó desproporcionadamente y son cada vez menores las posibilidades de empleo o de educación para los jóvenes. Esto es así, dijo, “porque un grupo convirtió a la Presidencia de la República en un comité para el beneficio de unos cuantos, mientras el pueblo sólo tiene lo suficiente apenas para sobrevivir”.
Esto, agregó López Obrador, no es algo nuevo, transcurren ya 25 años que el grupo en el poder tiene el mismo propósito al impulsar una política que empobrece a la gente, porque si una sociedad está satisfecha porque hay bienestar, porque hay trabajo y hay posibilidades de estudiar, está tranquila; sin embargo, optaron por el camino opuesto y han agravado la desigualdad y propiciado un país en el que unos cuantos tienen todo mientras la mayoría carece de lo más indispensable.
“Ahora que el país está en bancarrota, con problemas graves, ahora precisamente quieren entregar el petróleo a los extranjeros, lo que va a traer más pobreza; por eso tenemos que evitar que se sigan ahondando las diferencias, por eso es que no queremos que se privatice el petróleo. Muchos dicen ‘¡a mí qué me importa eso!’, pero no saben que si entregamos el petróleo nos vamos a quedar hasta sin presupuesto, ya que éste se compone en 40 por ciento por los ingresos petroleros”, explicó.
El gobierno beneficia a quienes apoyaron el “fraude” electoral
El camino del gobierno federal, insistió, es el de seguir beneficiando a todos aquellos que apoyaron “el fraude” electoral de 2006 y llevaron “al espurio de Calderón” a la Presidencia de la República, “¿pero de qué sirve llegar a ese cargo si se es impuesto por un grupo?, de nada, porque Calderón está atado de pies y manos, está obligado ahora a pagar los favores a la mafia que lo apoyó en el fraude.
“¿Y cómo lo hace?, a la cacica Elba Esther Gordillo le entregó la Secretaría de Educación Pública, le dio a su yerno el control de la educación básica; ahí está una señora como secretaria formal, pero quien manda en la secretaría es Gordillo, a quien le dio también la Lotería Nacional y el ISSSTE. Mientras a otros empresarios les dio beneficios impositivos, como el caso de Telmex, que paga sólo 2 por ciento anual; Cemex, 3 por ciento; Coca-Cola, uno por ciento; Maseca, 2 por ciento, y Wal-Mart, uno por ciento, mientras el resto de los mexicanos tienen que pagar tasas impositivas proporcionalmente más altas. Todos ellos contribuyeron al fraude para imponer a Calderón y reciben estos beneficios como pago. Calderón está al servicio de unos cuantos, y así no se puede servir al pueblo”, dijo.
López Obrador visitó los municipios de Xochihuehuetlán, Huamuxtitlán, Alpoyeca, Cualac, Olinalá y Tlapa, donde cerró sus actividades del día con un mitin al que asistieron más de 3 mil personas.
Este jueves continuará la gira por Cochoapa, Metlátonoc, Alcozauca, Tlalixtaquilla y Xalpatlahuac; el viernes visitará Iliatenco, Tlacoapa, Malinaltepec, Atlamajalcingo y Copanatoyac; el sábado estará en Acatepec, Zapotitlán, Atlixtac, Ahuacuotzingo y Hueycantenango, y el domingo finalizará su recorrido por Zitlala, Chilapa, Apango, Tixtla, Quechultenango y Mochitlán.
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