Apremia Calderón a transformar el sector eléctrico; perfila reforma a LFC

México gana la batalla por atraer inversión, afirma al inaugurar parque industrial

Claudia Herrera Beltrán (Enviada)

Toluca, Méx., 13 de diciembre. Tres días después del apagón que afectó zonas del Distrito Federal y el estado de México, el presidente Felipe Calderón apremió a transformar el sector eléctrico con el fin de garantizar que el centro del país tenga un suministro permanente, seguro y a costos cada vez más competitivos.

Con ello empezó a perfilar una reforma de Luz y Fuerza del Centro (LFC), para lo cual llamó a hacer “reflexiones profundas y compromisos conjuntos” con los tres niveles de gobierno –federal, estatal y municipal– y con el “sindicato”, en alusión al Mexicano de Electricistas (SME).

En su mensaje, la única mención que hizo de LFC –que suministra electricidad al Distrito Federal, el estado de México y municipios de Morelos, Hidalgo y Puebla– fue cuando reconoció el “esfuerzo especial adicional” que hizo la paraestatal para suministrar energía de calidad al parque de proveedores de Chrysler inaugurado ayer en esta ciudad.

Sin embargo, el michoacano no dio mayores detalles de su proyecto. Sólo habló de la conveniencia de emprender “nuestras transformaciones” para ofrecer electricidad con calidad y seguridad en su suministro en beneficio de las empresas y de millones de usuarios “que vivimos en esta zona”.

Insistió así en que la meta consiste en generar condiciones de infraestructura y de servicio que permitan mantener el crecimiento del empleo productivo en la región.

Históricamente, el SME ha sido un valladar de los proyectos de privatización del sector eléctrico y ha denunciado políticas gubernamentales para asfixiar a LFC.

Reitera solidez financiera

El Ejecutivo aprovechó también su rápida visita al estado de México para reiterar que el sistema financiero y bancario del país es sólido y estable, aun en las situaciones de turbulencia que puedan enfrentar otras economías.

Agregó que con “mucho esfuerzo”, y no obstante que otros países tienen ciertas ventajas, México está ganando la batalla por atraer inversión y se está consolidando como el mejor destino para la industria automotriz.

Elogioso con el sector, aseguró que es uno de los pilares de la economía mexicana, porque representa 18 por ciento del producto interno bruto y genera un millón de empleos, los cuales, según Calderón, son “bien pagados”.

Se enorgulleció de que 2007 será un año histórico en la producción de vehículos en el país, con más de 2 millones de unidades, tres cuartas partes de las cuales son exportadas, y pronosticó que esta cifra aumentará 9 por ciento el próximo año, y en cinco años la producción alcanzará 3 millones de vehículos.

Por eso, convocó a “cuidar” la industria automotriz, estableciendo una regulación que frene prácticas desleales o nocivas para el propio consumidor y dañe la planta productiva de vehículos para consumo nacional.

Tanto Calderón como el gobernador mexiquense, el priísta Enrique Peña Nieto, presumieron que, en sus respectivos ámbitos, están alcanzando las metas de crecimiento de puestos de trabajo, aunque el segundo advirtió: “no podemos confiarnos, señor Presidente, sobre todo si reconocemos la alta expectativa que hay de generar los empleos en el centro del país”.