De la antidemocracia, también llamada dictadura.
Sin importar la filiación o la preferencia hacia una corriente política u otra (que todas son lo mismo, en nuestro México a los Partidos Políticos solo les interesa el dinero) en una consulta popular nunca se hubiera aprobado el que los policías pudieran allanar los domicilios sin la orden de un juez, como acaban también de aprobarlo los señores senadores.
Con lo que fehacientemente quedó expuesto que la democracia es una farsa. Y es de esperarse que para las próximas elecciones el Pueblo tome conciencia de que, por quienes votó para que los representara ante las Autoridades, decidieron en contra de la indiscutible mayoría que rechaza tajantemente semejante retroceso constitucional.
Solo falta que la influencia yanqui sea tan grande que dentro de poco también se autorice el ahogamiento como técnica para los interrogatorios (como ya fue aprobado en los EEUU) y que en lugar de prisiones de alta seguridad, a los presos se les envíe a Guantánamo.
Han oficializado la dictadura y luego se quejan de que haya guerrilleros. ¡De mal en peor!.
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