Se agudizó el clima de hostigamiento contra el jerarca
Laura Poy Solano
Organizaciones en pro de los derechos humanos iniciaron una campaña en apoyo al obispo de la diócesis de Saltillo, Raúl Vera López, ante lo que consideraron un clima de “hostigamiento y amenazas” en su contra, luego de su participación en la defensa de los derechos de las sexoservidoras violadas por militares en Castaños, Coahuila, y el acompañamiento a los familiares de los mineros muertos en la mina Pasta de Conchos.
Integrantes de la organización Red Solidaria Década contra la Impunidad y el Observatorio Eclesial señalaron que al iniciar la campaña Una luz para nuestro buen pastor, convocan a todas las organizaciones civiles del país a sumarse a esta acción, que busca “sensibilizar a la ciudadanía sobre los riesgos que enfrentan quienes apoyan y acompañan la lucha por la dignidad y la justicia, pero también es un claro llamado a la jerarquía católica a respaldar el trabajo de uno de sus hermanos”.
En conferencia de prensa, José Guadalupe Suárez, director del Observatorio Eclesial, señaló que al entregar en la nunciatura apostólica en México una carta dirigida al papa Benedicto XVI, en la que expresan su reconocimiento a la labor realizada por Raúl Vera en pro de los derechos humanos de comunidades indígenas, de mujeres y trabajadores, “buscamos enviar un mensaje muy claro para decir a quienes se sienten molestos o incómodos por el trabajo que realiza el obispo, que él no está solo, porque la sociedad civil también apoya sus demandas de justicia y dignidad”.
La campaña convoca a defensores de derechos humanos, a comunidades eclesiales de base, activistas sociales y ciudadanos en general a enviar cartas de apoyo al obispo de Saltillo, con copia a la nunciatura Apostólica en México, a fin de “dejar constancia del apoyo y reconocimiento a su importante labor”.
En tanto, Jaqueline Campbell Dávila, vocera del obispado de Saltillo, confirmó que hasta el momento Vera López no ha recibido ningún extrañamiento del Vaticano por sus actividades de solidaridad con las víctimas de Pasta de Conchos o de Castaños, por lo que integrantes de su grupo aseguran que la “estrategia fue orquestada en México y no” por el Vaticano”.
Destacó que tras darse a conocer el pasado 6 de noviembre la denuncia presentada por el juez penal de Monclova, Hiradier Huerta Rodríguez –quien llevó el caso de los militares que violaron a sexoservidoras en el municipio de Castaños, y quien pidió al papa Benedicto XVI iniciar un procedimiento canónico en contra del obispo de Saltillo, por lo que presentó una denuncia ante el Tribunal Supremo de la Asignatura Apostólica, al considerar que Vera habría incurrido en “abuso de potestad eclesiástica”–, el clima de hostigamiento y amenazas “se ha agudizado, porque desde la época en Chiapas, al lado del obispo Samuel Ruiz, siempre ha existido mucha presión sobre su trabajo, pero hoy constatamos un recrudecimiento, pues sin duda su labor afecta muchos intereses”.
Al respecto, activistas informaron que este martes entregarán un reconocimiento a Vera López.
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