Nadie puede quejarse

Por Ricardo Andrade Jardí
¿Venderán PEMEX y después qué? Una vez saqueado nuestro patrimonio energético, en pactos secretos y mentiras oficiales, por quienes ni siquiera pueden presentarse en actos públicos y demostrar que la elección 2006 les favoreció con los votos ciudadanos; les favoreció, sí, el fraude, la manipulación mediática, el dinero empresarial, el cual tendríamos que investigar si no es también de las empresas trasnacionales que hoy sabemos pactaron la venta de PEMEX por la puerta de atrás, que tanto le gusta al usurpador.
- ¿Y después qué? Pregunta un campesino.
- ¿Después? n’más espérese a enero y ahora sí sabrá lo que es bueno.
- ¿Enero?
- Así es, a enero n’más, y ya sabrá lo que es que todo cueste el triple y que tenga que caminar el doble, porque ya le subieron de nuevo al camión y comer menos porque la verdura ya no da y no digamos la gallina que ya ni lo come, pues hace rato que su corral está vacío, que no, pues ahora menos, que lo llena... y ni se le ocurra decir nada que ya la policía puede entrar a su casa así n’más y llevárselo nïmás por quejarse, gracias al Jesús ese que un día vino a decirnos que votáramos por él... ¿se recuerda?

- Pues sí, si hasta bailongo hubo, ¿qué no?
- Exacto, pues él es uno de esos que ya le dio permiso a la policía de entrar a su casa sólo por que al vecino se le antoje decir de usted cualquier cosa ¿cómo ve?
- Pero yo pensé que todo estaba mejor que antes...
- Eso se lo dijo la tele.
- Pues sí, me lo dijo la tele, pero si esos señores lo dicen, ¿por qué no tendría que ser verdad?
- ¡¡¡¡¡¿...?!!!!!
Así las cosas, fútbol y circo para enajenar, mientras el usurpador impone su sueño dictatorial, con ayuda de la impunidad pactada del PRIAN y de la aspiración mediocre de un día ser como ellos del PRD.
PEMEX, no está en venta, ya fue vendida y sin ningún beneficio para México, pero sí para los que han traicionado al país. Donde la impunidad impera, al amparo de la pasividad y el silencio, lo que menos preocupa a un traidor son las consecuencias futuras de sus actos. Veremos al usurpador en turno como gerente de alguna petrolera, de las que hoy se están quedando con PEMEX, como ya lo hizo Zedillo con Ferrocarriles, a fin de cuentas lo único que hoy vale es el dinero que uno pueda robarle al país para pagar el confort de ser un cretino acomodado el resto de sus días.
Mientras tanto, acá se anuncia ya la crisis económica, que se suma a la cultural y social, que en enero recibirá de golpe y porrazo a millones de familias, que tendrán que enfrentarse con el hecho de que su realidad económica nada tiene que ver con la realidad telecrática y usurpadora que estas fiestas decembrinas nos ha vendido.
El primer golpe será el recibo de luz con un aumento de regalo, para de ahí recibir todas las noticias del aumento a la comida, al transporte, a la ropa... y un módico aumento de menos de dos pesos al salario.
Ni hablar, nadie puede quejarse de que el sistema sea aburrido, en nuestra institucional y neoliberal “Democracia Corporation S.A.”, no salimos de un asombro cuando ya recibimos las siguientes sorpresas.