Bases del EZLN denuncian más agresiones de miembros de la Opddic

Aseguran que agentes de Seguridad Pública están implicados en los actos violentos

Policías de San Cristóbal de las Casas podrían realizar desalojos en reserva ecológica

Hermann Bellinghausen (Enviado)

Ocosingo, Chis. 1º de enero. Al concluir 2007 se suscitaron nuevas agresiones contra bases de apoyo zapatistas en la región Agua Azul, por parte de integrantes (o “ex miembros”, ya no se sabe) de la Organización para la Defensa de los Derechos Indígenas y Campesinos (Opddic). El 29 de diciembre, Pablo Silvano Jiménez fue baleado y herido por policías sectoriales y un miembro de dicha agrupación en la comunidad Betel Yochiv, cerca de Agua Clara.

Dos días antes, el 27, Julio Hernández Gómez fue agredido a machetazos en la ranchería Agua Azul Chico, por miembros de la Opddic de la comunidad Cascadas de Agua Azul. Éstos pertenecen al grupo que muy rumbosamente “entregó” sus armas al secretario de Justicia, Amador Rodríguez Lozano, el 20 de diciembre, e incluso se “deslindó” de la organización y de la “violencia”, si bien pidió la intervención de la policía para desalojar a los zapatistas.

Esto se da en un contexto de amenazas y agresiones contra las bases zapatistas en diversas partes. Así, existe la posibilidad de que la policía de San Cristóbal de las Casas intente desalojar este miércoles a las bases del EZLN de la Reserva Ecológica de Huitepec, según “prometió” el nuevo alcalde coleto, Mariano Díaz Ochoa, a los priístas de Alcanfores, comunidad vecina. Éstos, además, han alardeado de estar armados, “por si Díaz Ochoa no cumple”.

También parece en peligro la población de San Patricio, municipio autónomo La Dignidad, en la zona norte, donde los priístas pretenden expulsar a las familias zapatistas, y este lunes “ya las tenían rodeadas”, según información no confirmada.

La junta de buen gobierno (JBG) Corazón del arco iris de la esperanza, del caracol de Morelia, denunció que Silvano Jiménez, de 41 años, fue baleado con una pistola calibre 9 milímetros por Elías Jiménez López, del mismo poblado Betel Yochib y miembro de la Oppdic, quien lo persiguió, “escoltado por dos elementos de la policía sectorial del estado. Hasta ahora no se saben sus nombres, pero se distinguió por sus uniformes”, añade la JBG.

Cuando Jiménez López disparaba (desde la camioneta de la policía, según reportó a su vez el Capise este lunes), Silvano Jiménez echó a correr. “En esos momentos empezaron a tirarle también agentes de Seguridad Pública y fue herido en la pierna derecha. El compañero siguió corriendo, pero a unos 153 metros se quedó tirado y gritó: ‘me están matando’. Al escuchar que el compañero estaba pidiendo auxilio, empezaron a retirarse los elementos de la sectorial”, quienes viajaban en un vehículo con matrícula 031 de la policía sectorial del municipio de Palenque.

“El compañero se quedó tirado a la orilla de la carretera gravemente herido, con una bala de arma AR-15, calibre 5.53, de la policía sectorial”. Allí fue a socorrerlo su hermano.

Los hechos ocurrieron en el territorio de la región autónoma San José en Rebeldía (municipio oficial de Chilón). “Este problema fue investigado en el lugar de los hechos y se comprueba con 11 casquillos 9 milímetros y uno de AR-15, 5.53 milímetros, en manos de la JBG de Morelia.”

La junta denuncia la complicidad con el agresor mencionado de Abel Deara Hernández, Gaspar Gómez Álvaro, Emilio Hernández Pérez, Sebastián Guzmán Deara, Carlos Deara Muñoz, Juan Saragos Luna, Sebastián Moreno Pérez, Miguel Saragos Luna, policía local de ejido Betel Yochib; Francisco Guzmán Hernández, Miguel Hernández Moreno, de Agua Clara; Gaspar Deara López, y el agente auxiliar de Betel Yochib Gaspar Guzmán Álvaro. Todos, “cómplices de la misma banda paramilitar”.

Las autoridades autónomas responzabilizan de lo sucedido a los gobiernos federal, de Felipe Calderón, estatal, de Juan Sabines, y municipal, de Antonio Moreno López, en Chilón.

En tanto, en la Agua Azul Chico, el día 27, aproximadamente a las 21 horas, “el hermano de esta comunidad de nombre Julio Hernández Gómez, de 20 años de edad, colaborador de nuestro municipio autónomo, salió de su casa para hacer su necesidad”, refiere la misma JBG de Morelia. Como a dos metros de su casa, un grupo de miembros de la Opddic, del ejido Cascada Agua Azul (municipio Tumbalá), lo esperaba con machetes.

“Este grupo lo fue a machetear inocentemente y el hermano corrió, pero a los 32 metros cayó. Ahí lo volvieron a golpear. En ese momento escucharon los familiares de Julio Hernández Gómez y salieron, y vieron que dos personas lo tenían agarrado mientras el otro lo estaba macheteando. Estos familiares lo fueron a defender y quitaron el machete. Es cuando empezaron a huir estas tres personas, que son miembros de la Opddic.”

Hernández Gómez “quedó gravemente herido, macheteado en la frente, y pagó con su sangre sólo por apoyarnos con nuestra organización”, precisa la junta rebelde. “Los hermanos colaborantes llevan años sufriendo esas acciones de violencias y amenazas, junto con los compañeros bases de apoyo de nuestro municipio autónomo”.

En este caso, la JBG subraya la complicidad con los agresores de Salomón Moreno Lopez, líder de la Opddic y tesorero de la cooperativa Ecoturística Indígena, que “entregó las armas” al gobierno. También José Alberto Urbina López, Enrique Moreno Álvaro y otros ejidatarios “ecoturísticos” de Agua Azul.