Bravuconadas del ilegítimo

Ricardo Andrade Jardí

Y mientras el usurpador, tan demócrata él, que se negó a contar los votos con los que la "maestra" y su cuñado dicen que ganó la elección del 2006, ahora nos sale con que a él sí le gustan los retos y que la crisis en Estados Unidos es un reto para demostrar... quién sabe qué cosas, pues la crisis gringa será mundial y arrastrará con ella fundamentalmente a los países que dependen, gracias a viejas, nuevas, chatas y estúpidas visiones de su criminal economía, en fin ahí va el amigo de las moscas con sus declaraciones chistosas, envalentonado detrás de su cerco militar y de sus puertas traseras, en tanto el destino nos alcanza al resto de los mexicanos y el Ejército toma el mando con todo lo que eso implica y la guerra de los capos, que es en realidad la guerra por el poder político y económico de un país donde su clase política cambia la justicia por botellas de coñac y se entretiene sexualmente con niños y niñas, entre una mayoría ciudadana que no atina a ser ciudadanía entretenidamente enajenada frente al ruido necesario de su condición que emite, convenientemente, la gran niñera electrónica, que nos ha "educado" gracias al telecrático control de nuestras "conciencias".
Por otro lado, si a Fecal le gustan los retos y está que se muere de emoción ante el inevitable derrumbe económico, político y cultural, de nuestro vecino de dependencia y de su megasistema chatarra de hamburgercolademocracia, con el que nos hemos dejado reconquistar culturalmente, pues que sea él y quienes lo impusieron los que jueguen al príncipe valiente y que a los demás nos dejen fuera de su Real Show y nos devuelvan el espíritu republicano que nos han intentado robar desde que el usurpador Salinas fue impuesto por los intereses neocolonialistas de la transnacional "Democracia Corporation S.A." y nos han hecho tragar el consenso de que el libre mercado y la flexibilidad laboral (el derecho del patrón para despedir sin más al trabajador) son, junto con la desaparición de las políticas de carácter social, lo mejor para que los países no desarrollados prosperen... pero lo que no nos dijeron es que esa prosperidad sólo es para unos cuantos, bien poquitos, y no para todos los demás, que somos ante la vista del nuevo régimen global tan sólo una variable de pérdida, un número en la estadística de población y un tache en la estadística de desarrollo.
Si al usurpador le gustan los retos ¿por qué no empieza por solicitar que se cuenten los votos, casilla por casilla, de la elección del 2 de julio? (total él dice que ganó con esos votos) y luego de demostrado lo anterior, y suponiendo que efectivamente los votos le favorecen, como afirma su cuñado, se arriesga y voltea al Sur del continente y se permite ver cómo se puede realmente progresar en beneficio del pueblo y no cómo decaer en defensa de los intereses especuladores de las corruptas clases empresariales y de las decadentes y usureras clases políticas.
¿Por qué pretender que las bravuconadas del ilegítimo caballerito sean también nuestras? ¿Por qué tenemos que ser nosotros los que asumamos nuevamente las pérdidas de los retos del usurpador? ¿Hasta cuándo?