Por Ricardo Andrade Jardí
La pretendida reforma judicial es, en realidad, la legalización de la represión y la implantación del “nuevo” Narco Estado mexicano; los senadores del PRIAN y similares, han aprobado una reforma que violenta las garantías individuales, permitiendo que una de las policías más corruptas del mundo y sin duda una de las más analfabetas, entre sin orden de juez a la casa de cualquiera, bajo el pretexto de perseguir algún delincuente, que robe y destruya todos los vienes particulares de los residentes del domicilio en cuestión y que los ciudadanos afectados no puedan ni tengan instrumentos legales para defenderse, igual que en cualquier DICTADURA, pero los senadores “comprometidos”, con los intereses trasnacionales, han eliminado de la pretendida reforma, la posibilidad de que el ministerio publico investigue el lavado de dinero, o terminar con el secreto bancario, que es uno de los tantos instrumentos de los que el crimen organizado, desde las instituciones mismas, se vale justamente para “blanquear” el dinero, producto del narcotráfico y sus genéricos (contrabando, pornografía, pornografía y abuso infantil, turismo sexual, etc.).
Es claro que lo que se pretende es dotar de elementos represivos a organismos de gobierno que son, de origen, represores, dotar de “legalidad”, el allanamiento y toda la violencia que el mismo conlleva, dejando a los ciudadanos comunes a merced de los comunes delincuentes cobijados a la sombra de las instituciones policíacas, las mismas que en los informes internacionales (ONU) que tanto “respetan”, las catalogan entre las 10 policías más corruptas y violentas del planeta.
La reforma aprobada en el senado por las corrientes del PRIAN (PRI, PAN) y su similar PVEM, no es otra cosa que la implantación de un Narco Estado, con la que se garantiza que políticos y empresarios sigan lavando o viviendo del dinero del narcotráfico, mientras se abren las puertas a la represión contra toda forma de disidencia, es decir, contra los millones de ciudadanos que aún han decidido “no vivir de los grandes beneficios del narcotráfico”, el que parece ser, según lo votado por los senadores del PRIAN, el más respetable de los negocios… en fin, es un mundo al revés, donde la “democracia” privilegia a quienes viven del homicidio y castiga a quienes alazan la voz contra la violencia.
Una gran acción ciudadana, es la que ha empezado circulando la lista con los nombres de los senadores que aprobaron, como tendrán que hacerla con la de los diputados que aprueben una reforma de ley que protege delincuentes y castiga ciudadanos, es importante que esa lista la conozcan las nuevas generaciones para que no olviden nunca los nombres de los mediocres y cretinos sujetos que ostentándose como “nuestros representantes” le han abierto definitivamente las puertas al más terrible e hipócrita de los fascismos, es importante que los “hombres futuros”, que rescribirán la historia, conozcan a la pandilla de tecnócratas que cambiaron la dignidad de nuestro pueblo, golpeando a nuestra gente, a cambio de un puñado de limosnas arrojadas por los consorcios trasnacionales, que ya hacen su particular negocio de nuestros recursos estratégicos y a nuestras costillas.
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