Mecate corto a Calderón para evitar que privatice la industria petrolera: AMLO

Ninguna negociación con el gobierno panista, reitera en gira por comunidades de Puebla

La lucha no se la vamos a dejar a nuestros legisladores; llamaré a la movilización, advierte

Enrique Méndez (Enviado)

Santiago Miahuatlán, Pue., 30 de septiembre. Andrés Manuel López Obrador advirtió que “al pelele de Felipe Calderón lo vamos a traer a mecate corto” para evitar que cumpla el compromiso que –aseguró– contrajo con Estados Unidos de privatizar la industria petrolera, y afirmó que no habrá ningún tipo de negociación con el gobierno de origen panista. “Está pensando que le va a ser fácil, pero no se lo vamos a permitir”, remarcó.

Sin embargo, dijo que esa lucha –cuyos detalles se aprobarán en la asamblea de la Convención Nacional Democrática (CND), el 18 de noviembre– “no se la vamos a dejar a nuestros legisladores, será popular y voy a llamar a todos a la movilización, aunque nos acusen de alborotadores y revoltosos”.

Ante sus simpatizantes, congregados en el jardín municipal, aseguró que después de la reforma fiscal la administración panista buscará entregar el petróleo y las empresas generadoras de energía eléctrica a capitales privados.

“Quieren entregar el petróleo, así de crudo y terrible. Quieren que se privatice esa industria, como se ha hecho con las empresas del Estado desde el gobierno de Carlos Salinas; eso es lo que ambicionan y si lo permitimos, el país ya no tendrá futuro. No vamos a dejar que se le entregue a particulares, ni nacionales ni extranjeros”, expresó.

Nuevamente cuestionó la política de incremento de precios que ha caracterizado al gobierno de Calderón en los primeros meses de su mandato, y resaltó: “¿Con qué autoridad moral dice que es Presidente si no ganó la Presidencia y está al servicio de varios intereses? Lo pusieron ahí como títere para proteger a la mafia de los negocios y de la política”.

López Obrador definió que en este sexenio se ha reforzado la tendencia al retroceso y a la separación entre los intereses de la clase política y los de la sociedad en su conjunto.

En Chapulco, donde llegó más tarde, dijo que ahora es más difícil para las personas conseguir dinero para su transportación diaria y para comprar insumos necesarios como el gas y, sobre todo, para su alimentación. “Millones de mexicanos siguen en la pobreza y en estos 10 meses del gobierno espurio los precios han aumentado 35 por ciento y el salario sólo 4 por ciento”, afirmó.

“Imagínense –expresó– cómo se sienten ahora los que votaron por el PAN”. Una mujer exclamó: “¡engañados, ya subió todo!” El ex candidato presidencial refirió que al promover la reforma fiscal Calderón y su partido, así como sus aliados del PRI, “ni siquiera repararon en que afectarían a la gente”.

Sin embargo, añadió, mientras los impuestos y los artículos de consumo aumentan, los funcionarios públicos de alto rango “se dan la gran vida a costillas del erario”.

Para ejemplificar la forma en que se conducen refirió: “Hace poco, en el cumpleaños del obispo de Ecatepec, Onésimo… Onésimo…” Varias personas completaron: “¡Onésimo Cepeda!” López Obrador continuó: “Reunió a todos los machuchones de la política y llegó el secretario de Gobernación, ese sí no me pidan que recuerde cómo se llama, en helicóptero, y también llegó el secretario técnico de Calderón (Juan Camilo Mouriño). Viven como sultanes, mientras en todo el país hay una pobreza preocupante e indignante”.

Después, el ex jefe de Gobierno del Distrito Federal llegó al municipio serrano de Vicente Guerrero, donde lamentó que la coalición Por el Bien de Puebla (PRD-Convergencia) no postulara candidato a la alcaldía, que es priísta, y controlada por cacicazgos de ese partido y de Acción Nacional.

La ex aspirante, una madre soltera con dos hijos y que ha hecho diversos viajes a Estados Unidos, fue amenazada por priístas y panistas de presentar una denuncia en su contra por supuesto tráfico de indocumentados, así que prefirió no contender en los comicios.

Anoche, los líderes regionales de PRI y PAN repartieron despensas para boicotear la concentración y convocaron a sus propios mítines en las comunidades vecinas de Telpatlán y Tepetxitxintla.

“Allá se llevaron las despensas y cartones de cerveza. Muchos se fueron e inclusive nos dijeron que no nos creyéramos, que venía un doble” del político tabasqueño, reveló un habitante, mientras escuchaba el discurso de López Obrador.

Out por tercera base

Por la tarde, antes de llegar a Azumbilla, el político tabasqueño se detuvo en el parque de beisbol, donde jugaron Halcones contra Novatos de la Cañada. El perredista tomó un bate y el pítcher Ángel Vergara le lanzó tres bolas; López Obrador conectó un batazo que sin embargo fue interceptado por el tercera base.

Ya en Azumbilla ofreció al perredista Armando Gamboa que el representante del PRD en el IFE, Horacio Duarte, presentará un recurso ante el Tribunal Electoral, porque el instituto estatal en la materia se niega a darle el registro como candidato a alcalde. Denunció que “el góber, al que no le quiero llamar precioso, porque es mañoso, tiene controladas a las autoridades electorales de Puebla”.