Ecuador acusa de negligencia a Porta, filial de América Móvil; puede perder la concesión

El presidente Correa criticó la calidad del servicio y tarifas de la telefonía móvil

Reuters

Quito, 5 de noviembre. El regulador técnico de las telecomunicaciones de Ecuador abrió un proceso para terminar con el contrato de concesión del operador de telefonía móvil Porta, controlado por la mexicana América Móvil, debido a fallas en la operación.

Con la resolución de la Superintendencia de Telecomunicaciones se abre un periodo de 30 días para que la operadora “subsane” las fallas reportadas el 25 de septiembre en el servicio, que afectaron a más de 5 millones de usuarios.

“Se inició el proceso de terminación del contrato (...) Se determinó negligencia en el servicio”, declaró el superintendente de Telecomunicaciones, Paúl Rojas.

El anuncio se produce en momentos en que la compañía de Carlos Slim trata de renovar por 15 años su concesión, que expira en 2008, en medio de las críticas del presidente nacionalista Rafael Correa por la calidad de su servicio y las tarifas que cobra a sus clientes.

El proceso pasó a manos de la Secretaría Nacional de Telecomunicaciones (Senatel), ente regulador que actúa como contraparte en el contrato de concesión, la que definirá en última instancia la terminación del acuerdo suscrito a mediados de la década de 1990.

“Vamos a acatar la boleta de la Superintendencia (...) la operadora Porta tendrá que subsanar las fallas en los 30 días, caso contrario se dará por nulo el contrato de concesión”, dijo Jaime Guerrero, secretario nacional de telecomunicaciones, vía telefónica a periodistas.

En este lapso, Porta puede presentar un plan encaminado a mejorar las fallas registradas en su operación o medidas compensatorias para los clientes afectados, las que deberán ser calificadas por la Senatel para tomar la decisión final. “Esperemos no tener que llegar a eso (terminar el contrato). Estoy seguro (de) que la operadora tendrá la voluntad para superar la falla”, agregó Guerrero.

Porta, filial de América Móvil, es acusada por la Superintendencia de Telecomunicaciones de una “grave degradación” en la calidad e interrupción en el servicio por más de 15 horas consecutivas en todo el país. La operadora, que ha presentado cuatro fallas en 2007, según datos oficiales, no emitió ningún pronunciamiento sobre la resolución.

Las fallas operativas presentadas por Porta, que según el marco regulatorio son causales suficientes para dar por terminado un contrato de telefonía móvil.

Rojas aseguró que los problemas en las operadoras de telefonía móvil serán tomados en cuenta a la hora de negociar la renovación de los contratos, a fin de obtener una mejor calidad del servicio.

Porta controla la mayor parte del mercado de telefonía celular en el país, con 6.5 millones de clientes. Las otras operadoras son Movistar, filial de Telefónica de España y la estatal Telecsa.

La filial mexicana también enfrenta una investigación del estatal Servicio de Rentas Internas (SRI), acusada de usar subterfugios legales para evadir o eludir impuestos sobre sus ingresos.

Ahora sí que, váyanse a robar a donde se los permitan, para eso está México que tiene un pelele con manga bien ancha.