El gobierno de Calderón no demuestra voluntad para acatar fallos en la materia, dice
Emir Olivares Alonso
El gobierno de Felipe Calderón no demuestra la voluntad para cumplir con las recomendaciones de la Comisión Interamericana de los Derechos Humanos (CIDH) ni con los acuerdos internacionales firmados por México en la materia, aseguró Soraya Long, directora para Mesoamérica del Centro por la Justicia y el Derecho Internacional (Cejil).
En entrevista realizada durante una visita de trabajo, la activista señaló que el Estado mexicano no cumple con el sistema interamericano de defensa a las garantías fundamentales, ratificado por México en acuerdos que ha signado.
Dijo que de todas las recomendaciones que la CIDH ha realizado a México “hay un cumplimiento cero”, pues de esos casos, entre los que destacan Aguas Blancas, los hermanos Tzompaxtle Tecpile, acusados de terroristas, y el del general Francisco Gallardo, entre otros, sólo se ha logrado la liberación de este último.
“En los casos que la CIDH ha concluido se acreditó la responsabilidad del Estado en la violación de los derechos humanos y ordena la reparación de los daños a las víctimas, la no repetición de los hechos, que se reconozcan esos agravantes y que se solicite perdón a los afectados, lo cual el gobierno mexicano no ha cumplido”, dijo.
Un aspecto que evidencia el mínimo interés de la gestión calderonista en la materia, señaló, es que pese a los llamados internacionales y nacionales no se ha atendido el caso de la jurisdicción militar para que los efectivos castrenses que vulneren las garantías fundamentales de los ciudadanos sean juzgados por instancias civiles.
Ante esto, la integrante del Cejil instó al Congreso mexicano a impulsar las reformas constitucionales al respecto. Por ello, durante la semana que cierra se reunió con representantes de la Secretaría de Relaciones Exteriores y con legisladores de ambas cámaras. “Cuando hablamos de las recomendaciones incumplidas no se comprometen a nada”.
Long señaló que otra omisión de las autoridades mexicanas es el argumento de que no intervienen en casos de violaciones a derechos humanos como en Juárez y Oaxaca, “pretextando el federalismo, pero la responsabilidad internacional es una sola”.
La misión del Cejil visitó comunidades en Chiapas, donde encontró que “persisten los desalojos, violencia sexual y no reconocimiento a tradiciones indígenas”.
Uno se pregunta, ¿entonces de que sirven las instancias internacionales?
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