Sociedad diferente

Raúl Vera López, Obispo de Saltillo, llama a articularla luego de reconocer que el sistema económico neoliberal excluye a amplios sectores sociales y plantea beneficios “por goteo a las grandes masas” / Necesario “perseverar en la lucha por el restablecimiento del Estado de Derecho” pese a las amenazas y hostigamiento

El Obispo Vera afirmó que la agresión que sufrió su colaboradora forma parte de una estrategia para controlar el descontento que provocan las políticas neoliberales.

OAXACA, Oaxaca, 26 de diciembre (APRO-CIMAC).- El Obispo de Saltillo, Raúl Vera López, llamó a “articular una sociedad diferente”, luego de reconocer que el sistema económico neoliberal excluye a amplios sectores sociales y plantea beneficios “por goteo a las grandes masas”.

En entrevista telefónica, Vera López consideró que es necesario “perseverar en la lucha por el restablecimiento del Estado de derecho”, pese a las amenazas y hostigamiento de las que ha sido víctima junto con sus colaboradores en la Diócesis de Saltillo.

Después de acompañar a Mariana Villarreal Contreras, colaboradora del área jurídica de la Diócesis de Saltillo, a interponer una denuncia por agresión y por el allanamiento a las oficinas donde trabaja, ocurridas el pasado 20 de diciembre, el Obispo afirmó que la agresión que sufrió su colaboradora forma parte de una estrategia para controlar el descontento que provocan las políticas neoliberales.

Eso está medido y calculado” en el neoliberalismo, que planteaba beneficios “por goteo a las grandes masas, pero esos objetivos están lejísimos de la realidad y se convirtieron en un cuento”.

Todo esto, sostiene Vera López con un dejo de tristeza, está inscrito en toda la articulación de agresión a las y los defensores de derechos humanos, porque es una característica del sistema económico neoliberal, que tiene cooptados a los políticos.

Afirma que incluso la Iglesia ha señalado que el sistema neoliberal es excluyente, pues deja de manera deliberada a grandes sectores de la población. “Ellos, incluso, preveían cómo iban a controlar la violencia que provocaría esa exclusión y una de las maneras de controlar la reacción social es su pretensión de anular a los defensores de los derechos humanos”.
En esa estrategia, agregó, se incluye la denuncia del juez Hiradier Huerta, quien lo habría acusado en el Vaticano de interferir en la vida judicial de la entidad, luego de la sentencia a tres de ocho soldados por la violación a trabajadoras de la zona de tolerancia de Castaños.

Consideró que quienes “viven de la injusticia, del desequilibrio social y los que se benefician de la desigualdad social no van a tolerar nunca que en este país existan personas que pidan el restablecimiento del Estado de derecho”. Por ello, insistió, es necesario articular una sociedad diferente.

A lo largo de sus casi 20 años como obispo –el próximo mes de enero cumplirá dos décadas—, Vera López ha sido víctima de varios atentados. Recordó que en Chiapas sufrió una emboscada y tres catequistas resultaron heridos. Les dispararon “paramilitares que estaban apostados en la maleza”; en otra ocasión una camioneta de su propiedad fue quemada; ha recibido amenazas durante las madrugadas; cerca de Cuatro Ciénegas, Coahuila, fue perseguido en la carretera por varios desconocidos; y la publicación de un “panfleto” para desprestigiar su trabajo.

Y en Veracruz, en vísperas del cambio de los 212 ayuntamientos de esta Entidad, la Iglesia Católica llamó a las autoridades municipales que tomarán posesión del cargo el 1 de enero próximo, a “acelerar el paso en el combate a la pobreza”.

El Obispo de la Diócesis de Veracruz, Luis Felipe Gallardo Martín del Campo, exhortó a los servidores públicos a cumplir sus promesas de campaña y no “esconder la cabeza como el avestruz”.

En su mensaje de fin de año, Gallardo pidió a las autoridades entrantes trabajar para que no se quede todo en promesas, “pues con sus hechos podrán confirmar a los ciudadanos que hicieron bien en votar por ellos”.

Señaló que, a pesar de que la realidad que existe en el Estado es la pobreza, “los políticos se tardan en atender ésta problemática, razón por la que tienen que meterle velocidad para resolver esta situación y no se quede sólo en oropel”.

Insistió que las nuevas autoridades municipales deben cumplir con sus promesas de campaña, sobre todo “porque 2008 será un año difícil para los mexicanos en materia economía”, debido al alza en los precios de los productos básicos que generara el aumento a la gasolina.

Gallardo dijo que la realidad de miles de familias veracruzanas representa grandes desafíos para los gobernantes, “por lo que los ciudadanos debemos estar preparados para los acontecimientos políticos, económicos y naturales que pudieran dejar huella el próximo año”.

Explicó que la Iglesia católica ha hecho un llamado a los funcionarios públicos electos por el voto ciudadano a cumplir con sus promesas de campaña y acelerar el paso en el combate a los grandes problemas, como la pobreza en Veracruz.