La unidad movilizadora del PRD debe extenderse hacia toda la izquierda social

Pedro Echeverría V.
Rebelión

1. El Consejo Nacional del PRD, con orteguistas de Nueva Izquierda (NI) y lópezobradoristas de Unidad de Izquierda (UI), aprobó por unanimidad dar un giro a la lucha en defensa del petróleo, al ubicarse al frente del movimiento popular, por encima de cualquier liderazgo, como lo propuso la corriente NI. Al declarar que sin partido no se articula la movilización popular, los perredistas “olvidaron” en los hechos sus profundas diferencias y festejaron su reconciliación con un resolutivo para impulsar la consulta popular nacional que defina el futuro de la industria petrolera mexicana y la soberanía energética. Plantearon iniciar una campaña nacional por la soberanía y la seguridad alimentarias, la defensa de la economía popular y el rescate del campo mexicano; apoyar a las organizaciones campesinas con objeto de priorizar la producción nacional de los artículos básicos y estratégicos: maíz, caña de azúcar, frijol, trigo, arroz, sorgo, café, huevo, leche, carne de bovinos, porcinos, aves y pescado.

2 . Me alegra que la socialdemocracia perredista (aquella que sólo piensa en procesos electorales y en obtener cargos de gobierno y, por tanto, buenos ingresos personales) al fin decida participar en movilizaciones sociales por la defensa de los energéticos y la economía popular. La derecha panista y priísta más atrasada (la que esperada el rompimiento entre los orteguistas y lópezobradoristas) debe estar enfurecida con los acuerdos de unidad para la defensa del petróleo, del salario y el trabajo. Pero la derecha “inteligente” encontrará en ese camino de la unidad del PRD la posibilidad de negociar en paz y de integrar a la actual oposición a tareas de gobierno. La realidad es que la política no es fácil: lo que tácticamente puede ser correcto en lo inmediato puede ser un error en la estrategia. Los partidos se descoloran y corrompen en la medida en que hacen amplias alianzas, pero si no las hacen conservan con firmeza sus principios puristas de honestidad pero suelen estancarse. Habría que reflexionar mucho, ¿no?

3. Pero la fuerza del PRD (si realmente integrara a todas sus corrientes para adoptar todos los tipos de lucha) por sí sola es débil para lograr grandes batallas en defensa de los intereses del pueblo. Para ganar elecciones, para negociar y avanzar en cargos de gobierno no se requiere mucho; pero para obligar al poder burgués a la distribución equitativa de la riqueza, para que el gobierno no se entregue sumisamente al imperio yanqui, para frenar todo tipo de privatizaciones y para acabar la represión contra las luchas del pueblo, se requiere unir fuerzas con los obreros electricistas, petroleros, mineros; así como con campesinos, profesores de la CNTE, la APPO, zapatistas, etcétera. La lucha actual contra la privatización petrolera debe prolongar la unidad para evitar la reforma burguesa de la ley del trabajo, así como toda una serie de “cambios o reformas estructurales” que la derecha panista está preparando introducir si consigue los del petróleo. Debemos prepararnos a resistir con unidad y decisión.

4. ¿No es grave acaso, y hasta merecen la cárcel esos funcionarios que han desplomado a Pemex? Hoy se publica que del año 2000, cuando el PAN ascendió al poder, Pemex ha sufrido un constante deterioro, pese a que en los pasados siete años han prevalecido condiciones extraordinarias para la explotación de crudo: bajos costos y altos precios. De acuerdo con cifras oficiales, Pemex pasó del sexto lugar en 2000, cuando Vicente Fox llegó a la Presidencia de la República, al número 11 en 2007, primer año de gobierno de Felipe Calderón, según se desprende de datos del 29 de mayo de 2008. Entre 2000 y 2007, periodo de gestión del PAN al frente del gobierno la deuda en la paraestatal se duplicó, la producción se ha estancado con tendencia a la declinación, la refinación no se ha incrementado y las reservas probadas también se desplomaron, al pasar de una relación entre tasa de restitución contra producción de 22 a 9.2 años.

5. Sin embargo por falta de unidad y de la fuerza necesaria Fox y su familia, a pesar de decenas de comisiones de investigación organizadas por partidos y legisladores, sigue burlándose (con razón) de la incapacidad política de quienes lo han acusado. Todo se ha quedado en denuncias y más denuncias y Fox sigue tan feliz y campante como si sus desfalcos y mal gobierno fueran sólo un chiste de mal gusto o un decir de la izquierda. Otra cosa sería, otro comportamiento tendrían los gobernantes, si contáramos con un gran movimiento de masas en las calles dispuesto a paralizar las ciudades cuando sea necesario (aun que sea sólo las instituciones públicas y privadas de la ciudad de México) por tres días. Por eso al evitar los lópezobradoristas la continuación de las confrontaciones internas en el PRD para beneficiar la lucha contra la privatización, hasta en tanto llega el Congreso del PRD, dieron un buen paso unitario.

6. La muy corrupta dirigente del SNTE, Esther Gordillo, con la aprobación y el apoyo del presidente ilegítimo Calderón, ha comenzado la construcción de otra organización de masas al firmar un pacto con la dirigencia, también corrupta, del sindicato petrolero. Son dos poderosos sindicatos charros (vendidos al gobierno) que en dos o tres días, al parecer, han logrado apoyo de decenas de sindicatos con el mismo interés. En tanto la izquierda, después de muchas décadas, aún no ha logrado un poderoso organismo de masas, Gordillo se mueve con gran habilidad para garantizar fuertes apoyos a Calderón y así seguir influyendo en su política. La movilidad de esta mafiosa líder la convierte en la más habilidosa figura del sindicalismo charro del país y, al mismo tiempo en el personaje político que más cerca ha estado de los últimos mandatarios presidenciales del PRI y del PAN. Su influencia en los gobierno de Fox y Calderón ha sido determinante.

7. ¿Cómo poner un alto al incremento de hostigamientos y agresiones contra las bases de apoyo zapatistas en Zinacantán o cuando los caciques privan del agua a varias familias de la comunidad de Sok’on, ambas poblaciones en el estado de Chiapas? ¿Cómo evitar las brutales represiones y encarcelamientos que realizó la Policía Federal Preventiva (PFP) en el ejido Huizopa, Ciudad Madera, Chihuahua, para desalojar a los campesinos de sus propias tierras y encarcelar a sus dirigentes en estos últimos cinco días de mayo? ¿Cómo obligar a los gobiernos a respetar a los trabajadores que no roban a nadie, no asaltan, no matan, pero sí luchan por defender sus derechos y la vida de su familia? El pueblo tiene que protestar, tiene que luchar, pero como sus fuerzas son pequeñas, siempre son derrotados, son encarcelados o asesinados. Preguntan ¿Para qué luchar si siempre nos reprimen y asesinan? ¿Cómo van a crecer los movimientos sin posibilidad de triunfar?

8. Por eso es indudablemente importante que el PRD haya superado las pugnas internas que lo dividían, que ahora el PRD y el lópezobradorismo pudieran enfrentar juntos la privatización del petróleo, la carestía, estar con los campesinos y demás problemas del pueblo. Pero tampoco hacernos ilusiones para poder exigir a esos dirigentes que se comprometan seriamente con las necesidades del pueblo pobre y explotado. Y el mejor compromiso es impulsar la participación de masas en las calles, la unidad con otros sectores de izquierda comprometidos con las luchas sociales. Si esa “unidad” sólo se convierte en una farsa más para lograr acomodarse dentro del sistema de dominación, entonces hay que reencausar la lucha contra los que la traicionan y tratan de engañar. La lucha contra la privatización es una magnífica coyuntura para que la población se movilice contra la clase dominante, pero no debemos permitir que sea engañada.

pedroe@cablered.net.mx