De las teocracias.
Una vez más, para no variar, el Estado Vaticano, la iglesia judía de Roma, vuelve a ser el factor de desunión entre los mexicanos. El respeto a los feligreses que alegan quienes unilateralmente cerraron la Catedral metropolitana, pretenden desligarlo del principio juarista que habla del respeto al derecho ajeno, que también tenían y tienen quienes fueron violentados por el anormal tañer de las campanas el domingo pasado. Aunque cobardemente no lo hayan reconocido quienes, visto está, tienen, entre otras muchos defectos, la costumbre de mentir.
Si bien dijo Polibio que “Las democracias terminan siempre en violencia y anarquía”. Y el muy ilustre Séneca se refirió al mismo sistema de gobierno diciendo que “Es más cruel que las guerras o los tiranos”.
Es consenso general que las teocracias son la más infamante de las formas de gobierno; y la respuesta que la Secretaría de Gobernación dio manifestando que la curia católica tiene el derecho de cerrar un inmueble que no le pertenece (lo que flagrantemente es violatorio del Estado de Derecho) es un claro indicador que hace evidente el sometimiento de las autoridades civiles a la charlatanería religiosa.
La vuelta al pasado es el futuro que nos espera a los mexicanos y solo faltará una chispa para que de nueva cuenta la Patria vuelva a incendiarse.
Quien no aprende de su pasado está obligado a repetirlo y al parecer nosotros no hemos aprendido nada.
Suscribirse a:
Comentarios de la entrada (Atom)
No hay comentarios.:
Publicar un comentario